Examen y renovación en Rosh Hashana 5773

Rosh Hashana (Cabeza de Año) es una de las cinco fiestas bíblicas mayores del calendario hebreo y acontece durante los dos primeros días de Tishré. Sin embargo, en ninguna parte del Tanaj se menciona que el año comience en el principio de Tishri, considerado como el séptimo mes del calendario, contado desde el primero de Nisan. Rosh Hashana se le conoce también como Iom Teruá (el día del toque del shofar) o día del recuerdo (Iom Zikaron) y también Iom Hadin (Día del Juicio). El concepto de año nuevo tal como se conoce actualmente aparece solamente en la Mishna que indica “El primero de Tishri comienza el año calendario” (Rosh Hashana, 1:1). Sin embargo, la obligación de observar la celebración de Rosh Hashana figura como un mandato divino recogido en el tercer libro de la Torah, en el Levítico o Vayikra, en el capítulo 23:23: “Y le dijo el Eterno a Moshe:- Diles a los hijos de Israel: El día primero del séptimo mes (Tishri) será para vosotros día de descanso, de convocación santa y lo conmemoraréis al son de la trompeta (del cuerno de carnero. Ese día no haréis trabajo servil y brindaréis al Eterno una ofrenda ígnea-”. El Rav. Najman Isaac comenta (Rosh Hashana, 8ª, pasim): “Se refiere al Juicio Divino, como está escrito. Los ojos de HaShem, tu D-s, están siempre sobre ella (Eretz Israel), desde el principio del año hasta el fin del año” (Devarim 11:12). Este comentario implica que, de cierta manera, desde el principio del año se dicta la sentencia de lo qué sucederá cuando finalice. El Año Nuevo no es una ocasión para el exceso y el júbilo incontrolado. Ingresamos en un período de reflexión, de examen interior y de recordación. El símbolo principal de este acontecimiento es el toque del Shofar durante la recitación de Musaf (repetición de la Amidá) en el rezo de la mañana o shajarit. El Shofar viene a ser como la alarma que llama a la reflexión del piadoso y al despertar de la conciencia adormecida del hombre desinteresado o desmotivado. A partir de Rosh Hashána discurren 10 días de retorno o de Teshuva, hasta llegar a Iom Kipur. Estos días tienen lugar en un clima de devoción ascendente, en los que revisamos nuestras acciones materiales y espirituales del año que pasó. Se le concede al hombre la oportunidad del perdón y la expiación. Nos purificamos mediante el pensamiento noble y la acción válida. Ante nosotros se nos abre un nuevo año, un nuevo ciclo vital, un cúmulo de nuevas oportunidades para que progresemos espiritualmente y seamos aún mejores, si cabe, en la obra de nuestras manos, en el cumplimiento de nuestras obligaciones morales y éticas, en lam práctica de las mitzvot, en el amor a nuestros semejantes, en el cuidado de nuestro entorno y en el respeto a todos los seres vivos. Ama la paz y persíguela. Rosh Hashana comenzará con la puesta del sol del domingo, 16 de septiembre, discurre los días 17 y 18. Rafael Ben-Abraham Barreto.

Fuentes: Centro Educativo Sefaradi de Jerusalem (Israel). Publicado en www.israelgrafico.typepad.com