Una mujer segura de sí misma, la Duquesa de Alba siempre fué haría lo que realmente le apetecía. Nunca se sintió enmarcada en unos cánones establecidos por la alta sociedad y lo más importante de todo es que supo vivir y disfrutar de la vida a cada instante. Hoy se ha ido a otro lugar en el que seguro que también sabrá sacar todo lo mejor de esos años. Nacida en la bonita ciudad de Sevilla un 28 de abril de 1926, la misma ciudad en la que nos ha dicho adiós. ¡Hasta siembre Duquesa!
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