La ulmaria fué antaño usada por las brujas, según las cuales su embriagadora fragancia les permitía abandonar su cuerpo. Era frecuentemente utilizada e la decoración de las iglesias para bodas y guirnaldas nupciales. Hace 400 años era la hierba favorita de la reina Isabel I de Inglaterra, según la tradición alegraba el corazón y deleitaba los sentidos. De la ulmaria se sintetizó por primera vez la aspirina. Hacia 1.830 se le descubrieron propiedades antinflamatorias y más adelantese emprendió la produciión industrial de la aspirina.. Sus hojas son ricas en minerales, tienen acción eficaz en el sistema digestvo y mejoran la función hepática. Una infusión de ulmaria es buena para la úlcera péptica o duodenal, pues dismnuye la secreción de ácidos en el estómago. También se utiliza contra el reumatismo y la artritis.
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