El trébol de cuatro hojas es una variación infrecuente del trébol de tres foliolos, comúnmente hallado en los campos. Se dice de él que nos trae la buena suerte. Una hoja, la esperanza, otra la fe, el amor y la suerte. Sus poderes son amplios. Ya desde el Antiguo Egipto se regalaban tréboles de cuatro hojas a los que iban a unirse y a los niños se les colgaban en el cuello para que estuvieran protegidos. El trébol de cuatro hojas es muy codiciado pero el de tres hojas no debemos tenerlo a menos. Irlanda celebra cada 17 de marzo el día de su patrón, San Patricio que llevó el evangelio hasta los celtas que habitaban la isla en el siglo V, explicándoles gracias a un trébol de tres hojas la existencia de la Santa Trinidad, convirtiendo a esta pequeña y humilde planta el emblema del país.
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